La transformación

Tal vez los argentinos votamos mayormente otra cosa, o tal vez dimos un cheque en blanco para que el Gobierno continúe gestionando el nuevo rumbo. Lo que seguro que es cierto es que nadie esperaba, después del discurso del Presidente en la noche del triunfo ni de sus posteriores entrevistas, un cambio de gabinete como el que produjo. Hasta Guillermo Francos se sintió empoderado el domingo 26 de octubre a la tardecita con el protagonismo que tuvo. Tanto que supuso su ratificación en el cambio, y eso le dijo a los periodistas que lo entrevistaron... que no era ninguno de los habituales prolibertarios. El fin de semana anterior al que pasó el Presidente cambió al dialoguista Francos por su vocero, Manuel Adorni, y consolidó a la guardia karinista en el Gobierno. Nadie puede dudar que Diego Santilli será un Ministro de Interior negociador y acuerdista, pero todos esperábamos a Santiago Caputo en un megaministerio que incluia el diálogo con los gobernadores y que nunca llegó. De cualquier m...

Iridiscencia


El grito de batalla presidencial coloreó el año electoral: "hoy se pintó de violenta el bastión amarillo; ahora a pintar del violeta el país".

Pero fue mucho más que eso, ya que la derrota del Pro en el distrito de gobierna desde hace de 20 años era todo lo que el Presidente esperaba de este turno, para el que el oficialismo nacional había anticiado que se conformaba con un segundo puesto.

Ni siquiera una figura tan moderado como Leandro Santoro logró seducir a los partidarios del viejo régimen; la atomización de candidaturas hizo el resto.

El domingo pasado Salta, Jujuy, Chaco y San Luis dieron buenas noticias al Gobierno Nacional, cuando el peronismo quedó desplazado al fondo en esas cuatro elecciones en las que el Pro no había llegado a tener presencia alguna. 

Era el paisaje deseado por Javier Milei: gobernadores con poder local y con capacidad de negociación, ya que LLA también logró allí legisladores y alguna posición ejecutiva destacada como en la capital salteña.

Pareciera ahora que una victoria del peronismo en la provincia de Buenos Aires, ya no sería tan grave para los mercados. Porque podría quedar como un triunfo aislado.

A partir de hoy, lo que estará en juego en las elecciones venideras de 2025 son las figuras que se proyecten al 2027. Quiénes serán los herederos de esta transición.+)

Comentarios