Retrospectiva del 2025

En enero, asume Donald Trump en los Estados Unidos y se perciben algunas notas claras en su política exterior: un pragmatismo económico que se reflejó en el Día de la Liberación, con aumentos arancelarios que después renegoció durante el resto del año, y un pragmatismo político que lo llevó a acordar con su par chino y, tácitamente, con el ruso, una división del mundo; él, por su parte, mantuvo dos pautas valorativas: la búsqueda de una pacificación internacional encubierta en su estilo pendenciero y una cuestión ideológica que lo alejó de Europa; en ese sentido, Davos fue un hito. En lo que respecta a la región, se mostró partidario de reforzar el bloque continental. La región, por su parte, se fue tiñiendo. Si bien este año asumió el uruguayo Yamandú Orsi, el triunfo de Rodrigo Paz en Bolivia y la asunción de peruano Jose Jerí, se vinieron a sumar a los presidentes argentino, paraguayo, ecuatoriano y salvadoreño, y lo que parecía un continente volcado a la progresía, se ha derechizad...

Sobre llovido


Después de un año exitoso en el que pudo ostentar resultados económicos y políticos -tantos como necesitaba para sustentar su programa de reformas-, el Gobierno entró al año electoral patinando.

Desde el discurso de Davos y su posterior marcha masiva de protesta, el Gobierno no para de recibir golpes; a veces autoinfringidos, como el caso $Libra o la insistencia de candidaturas resistidas para ocupar la máxima magistratura judicial de la Nación. Cuando no fueron fatas de obra, fueron de omisión, como el desaprovechamiento de la apertura del año parlamentario; toda el país esperaba el señalamiento de un norte por parte del Presidente, y fue evidente que lo tenía: el acuerdo con el FMI, pero a partir de esos días se empezaba a postergar.

En el medio se fue mezclando la interna de la derecha. Cuando Mauricio Macri terminó de entender los planes que el mileísmo tenía para con el Pro, se apoyó en las debilidades señaladas para presentarse como una alternativa razonable de un oficialismo que se radicalizaba.

... y sobre llovido vinieron los anuncios del Día de la Liberación Norteamericana, la independencia económica pregonada en la argentina hace casi un siglo por Juan Perón sonaba ahora en los micrófonos de la Casa Blanca republicana. A la incertidumbre que presentaba el cierre de las negociaciones con el Fondo Monetario, particularmente en el capítulo cambiario, se sumó el terremoto económico internacional.

Una a favor: el Gobierno entra en la crisis internacional con salud económica y cuentas bastante saneadas. Una en contra: en este contexto, nadie sabe a ciencia cierta si lo que pueda aprobar el FMI servirá o no para la salida del cepo cambiario en la Argentina, pieza clave para una rápida recuperación económica.

Es claro que Trump hizo esos anuncios para arreglar rebajas arancelarias masivas con Occidente, por lo menos. Pero aún es difícil suponer cómo terminaran esas negociaciones también masivas. Sólo Dios sabe qué puede pasar cuando se abre la caja de Pandona.+)

Comentarios