Fragmentación


 La agenda política, económica y social, no merece mayor análisis. Los problemas económicos, políticos y sociales, se aceleran vertiginosamente y se acrecientan. Las noticias se reiteran periódicamente y provocan deja vú. 

Los debates de los candidatos a diputado capitalinos y bonaerenses, en cambio, resultaron sorprendentes pero por lo artificial. Fueron patéticos shows en donde se dijeron cosas que nadie cree que se vayan a realizar porque los que aparecen en la pantalla no tienen el poder -ni la convicción- para ejecutarlas; dicen lo que los asesores les dicen que digan y votarán lo que sus patrones -los que les pagan a sus asesores- les digan que voten; y no necesariamente ambas cosas coinciden. Ante el menor reclamo de incongruencia, levantarán los hombros y mirarán tiernamente a los ojos como diciendo “¿qué querés que haga?”

Por eso, este panorama  intentará levantar la mirada analítica para lograr la perspectiva histórica. En ese sentido, el ataque mapuche al Club Andino Piltriquitrón es un síntoma de disolución del Estado Nacional tal como lo conocemos. En una sola semana pudimos ver 

1) al embajador argentino en Chile, Rafael Bielsa, utilizar su representación nacional para salir en defensa Jones Huala quien, en el mejor de los casos, es un delincuente común y en el peor, alguien que desafía el monopolio legítimo de la fuerza, que es una de las notas constitutivas del estado nacional; 

2) dos nuevos ataques de la violencia autopercibida originaria;

3) al Gobierno Nacional negarse a enviar refuerzos para evitar que se propague la situación de anomia a pesar del reclamo de la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, y

4) reconsiderar esa posición. 

Esta semana se cumplieron los diez años del anuncio del cese definitivo de la actividad armada de la ETA en desafío de la autoridad española, y se cumplen ya 16 de los Acuerdos de Viernes Santo que terminaron con el terrorismo norirlandés contra el dominio inglés. No obstante, las tensiones subsisten; particularmente, en el caso británico por el Brexit. Aunque el fenómeno mapuche se parece cada vez más a las FARC -cuyo armisticio está pronto a cumplir cinco años-, debido a su coincidencia geográfica con la región cocalera como la mapuche la tiene con la actividad hidrocarburífera. 

También en diciembre se cumplirán veinte años de una crisis inolvidable para los argentinos que llevó al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Carlos Ruckauf, a amenazar con denunciar el Pacto de San José de Flores. En aquel tiempo hubo más de una referencia al separatismo nacional; Adolfo Rodríguez Saá hizo declaraciones en ese mismo sentido, y casi todas las provincias emitieron cuasi monedas. No hace falta remontarse a Caseros ni al 11 de septiembre de 1852 para percibir la fragilidad constitutiva de la Nación.

Mientras que Chile militariza la región mapuche -fronteriza a nuestro país, dicho sea de paso-, la Argentina protege a ese colectivo autopercibido como tal; si al menos se pudiera sospechar algún interés nacional oculto en esta extraña protección, pero no. Todo lo contrario. 

En 1992 escribí una nota en La Prensa llamada “La República Federativa do Pampas”, que hacía foco en un fenómeno separatista gaúcho en Río Grande do Sul. Pero es más probable que Brasil ingrese en un estado de ebullición nacional a que suceda una guerra de secesión.

Ni los mayores especialistas pueden saber si este diciembre será violento, o no, ni si la economía estallará o si se la logrará contener un año más. Pero hay numerosos indicios de que al gobierno se le puede escapar de las manos en cualquier momento.

Mientras tanto, tenemos a un expresidente que anuncia que no acudirá a comparecer ante la Justicia, y a su partido que lo apoya. Más allá de las valoraciones que se tengan de la causa, eso tampoco colabora con la calidad institucional.

Por otra parte, a nadie rebela el hecho de que las amenazas mapuches contra Benetton y Lewis choquen con la invitación constitucional a todos los extranjeros que quieran poblar el suelo argentino. No sólo lo pueblan, sino que además invierten.

Algunos politólogos pronostican que el futuro de los Estados nacionales será la fragmentación dentro de bloques regionales de gobernabilidad atenuada. 

Puede parecer “volado” referirse a estas cosas de las que nadie habla, pero no hace falta mucho más que un gobernador levantisco e intereses económicos convergentes. +)

La frase


"En 1956, todos sabíamos que el Imperio Británico había terminado, pero la crisis de Suez lo dejó absolutamente claro. Y lo mismo pasa ahora con Estados Unidos"

Tom Tugendhat, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de los Comunes del Reino Unido y veterano de la guerra de Afganistán

El personaje


Facundo Jones Huala es el líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), a quien se le atribuyen estos hechos de violencia. Mucho se ha dicho de sus conexiones internacionales y hay literatura conspirativa sobre sus actividades. Lo cierto es que la inmensa mayoría de la etnia mapuche se niega a reconocer esta expresión violenta como propia.

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