En San Isidro, ni Posse ni Lanús

Todavía hay mucha gente que no sabe que hay que votar dos veces en la provincia de Buenos Aires. La primera, el próximo 7 de septiembre, se votan candidatos provinciales y municipales y en la segunda, el 26 de octubre, los nacionales.  Esta división perjudica a aquellos que colgaban todas sus votaciones de una sola boleta, pero favorece a aquellos que piensan y analizan cada voto, segmento por segmento. Lo mismo pasa a nivel nacional, en donde las dos fuerzas mayoritarias buscan polarizar la elección y plantearla en términos presidenciales. Pero lo cierto es que la elección es parlamentaria y lo único que se eligen son aquellos que hacen leyes y controlan al Poder Ejecutivo y la Justicia. Por lo tanto, muy lejos de convenir votar a el simplista buenos contra malos, lo mejor es votar aquellos que no tienen compromiso con nadie. Nuestra sugerencia es votar el 7 de septiembre las listas de Potencia que son republicanas y van a apoyar al gobierno nacional en las cosas positivas, pero v...

Tensiones y distensiones

Los analistas se desvelan por entender qué fue lo que hizo retroceder a la Presidenta al conceder asistencia financiera a la provincia de Buenos Aires, cuando lo único que había estado haciendo era castigar a Daniel Scioli en público y en privado.
Uno puede suponer que:
a) Más probablemente, haya percibido que este enfrentamiento -en plena situación de enfriamiento económico- le estaba dejando un pésimo rédito político y público;
b) Menos probablemente, que se haya percatado de que la crisis social, como consecuencia de la falta de fondos, avance desde el Conurbano a la Plaza de Mayo.
También uno podría pensar que la solidaridad expresada por el gobernador mediterráneo José Manuel de la Sota haya encendido una señal de alarma en la Rosada. Nadie habla de recrear una Liga de Gobernadores, como en tiempos de las presidencias de Carlos Menem y Eduardo Duhalde, pero sí se empieza a especular respecto de reuniones y concilios entre estos caudillejos que día tras día temen ser el próximo en la lista negra.
No parece ser ésta la razón, ya que su construcción política se ha verticalizado al punto del desequilibrio y el proceso de toma de decisiones está cada vez más cerrado.
Mientras tanto, en el equipo económico recalientan cerebros tratando de pensar en cómo contener las variables sin apagar el ritmo económico. Las culpas de la actual situación se emiten al portador.+

Comentarios