En San Isidro, ni Posse ni Lanús

Todavía hay mucha gente que no sabe que hay que votar dos veces en la provincia de Buenos Aires. La primera, el próximo 7 de septiembre, se votan candidatos provinciales y municipales y en la segunda, el 26 de octubre, los nacionales.  Esta división perjudica a aquellos que colgaban todas sus votaciones de una sola boleta, pero favorece a aquellos que piensan y analizan cada voto, segmento por segmento. Lo mismo pasa a nivel nacional, en donde las dos fuerzas mayoritarias buscan polarizar la elección y plantearla en términos presidenciales. Pero lo cierto es que la elección es parlamentaria y lo único que se eligen son aquellos que hacen leyes y controlan al Poder Ejecutivo y la Justicia. Por lo tanto, muy lejos de convenir votar a el simplista buenos contra malos, lo mejor es votar aquellos que no tienen compromiso con nadie. Nuestra sugerencia es votar el 7 de septiembre las listas de Potencia que son republicanas y van a apoyar al gobierno nacional en las cosas positivas, pero v...

Cariño en el Jardín Japonés
Como venimos diciendo, el camino electoral puede depararle más de un dolor de cabeza al oficialismo.
Vale aclarar que tras el triunfo de Bertone en la primera vuelta fuegina y Maurice Closs en Misiones todo salía como parecía estar pervisto. Hasta que, en el repechaje, cuando nadie pagaba un peso por la candidata socialista, terminó ganando Fabiana Ríos.
Además, el cierre de listas dejó numerosas víctimas, deseadas y no tanto. Hemos hablado ya de la situación de los aliados sindicalistas, sin embargo nadie esperaba la Decisión de Verna, de renunciar a la candidatura pampeana y que vino a recordar un sinnúmero de dirigentes que son oficialistas ma non troppo. Empezando por el cordobés José Manuel de la Sota y pasando por la actitud díscola de Juan Manuel Urtubey.
Entrando en lo electoral, si juzgamos más o menos exacta la encuesta que encargó el diario La Nación a Poliarquía podríamos aventurar que mañana Mauricio Macri le propinará una paliza a Daniel Filmus, aunque tendrán que ir a una segunda vuelta de difícil resolución para el kirchnerismo. De no renunciar de inmediato a ese nuevo escarmiento, los dos precandidatos que más miden en la oposición, Ricardo Alfonsín y Eduardo Duhalde, podrían usar ese ballotage como una medición entre ellos y Cristina Fernandez y de final cantado.
Inmediatamente tendremos la elección satafecina, en la que el Frente para la Victoria pelea por un segundo o tercer puesto.
Luego vendría el ballotage porteño y, finalmente, la elección cordobesa, en la que el kirchnerismo solamente lleva candidatos legislativos. Por más que el probable ganador, el exgobernador de la Sota, le dedique a Cristina su triunfo, a nadie se le pasará desapercibido que es amor de primavera.
Así se ingresará en las primarias abiertas y simultáneas, en la que la oposición podrá lucir a su mejor candidato y el oficialismo medirá sus fuerzas frente a él.
Por otra parte, la situación parlamentaria se ha vuelto difícil para el kirchnerismo y nadie sabe si estas cosas están calculadas o no. El peronismo parece haber ingresado en una especie de estado deliberativo.+)

Comentarios